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Ley de Moisés
Una ley es una regla que la gente debe obedecer. Usualmente esta escrita y generalmente esta formulada o hablada por alguien con autoridad. Esta persona también tiene la autoridad para hacer que las personas obedezcan estas leyes. Esta persona es el que gobierna a las personas de la zona.
En la Biblia, la palabra "ley" generalmente se refiere a la ley de Moisés. A esto también se le llamó la Ley de Dios o la ley de Yahweh. La ley de Moisés es la lista de cosas que Dios les dijo a los Israelitas que hicieran para honrarlo. Dios le dió estas reglas a Moisés y por ello se le llama la ley de Moisés. Esta ley está escrita en los primeros cinco libros del Antiguo Testamento. Estos libros también son llamados la Torá o Pentateuco. Ellos son: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio.
Más Información Sobre este Tema
Dios llevó a Moisés y a los israelitas al monte Sinaí después de que salieron de Egipto. En el monte Sinaí, Dios hizo un pacto con los Israelitas. Dios les dijo que si obedecían sus leyes, serían su pueblo especial (ver: Éxodo 19:5-6). Los Israelitas acordaron obedecer a Dios (ver: Éxodo 19:7-8; 24:1-8). Asi que Moisés subió al monte Sinaí, y Dios le dio la ley (ver: Éxodo 20-23).
Dios le dio a Moisés muchas leyes. La ley de Moisés contiene los Diez Mandamientos, leyes sobre el sábado, el tabernáculo, el sacerdocio, los sacrificios, la comida limpia e inmunda, la conducta sexual, la circuncisión, las fiestas y muchas otras leyes. Jesús dijo que la más grande de estas leyes era amar a Dios completamente (ver: Deuteronomio 6:5; Mateo 22:37).
Los Israelitas necesitaban amar y honrar las leyes de Dios. Ellos necesitaban pensar siempre en ellos. Y tambien necesitaban enseñarselos a sus hijos (ver: Deuteronomio 6:6-9; Salmo 119). Dios prometió bendecir a los Israelitas si obedecían sus leyes. El prometio proveer toda la comida que necesitaran, una vida en paz, y El se quedaria con ellos (ver: Levítico 26:1-13; Deuteronomio 28:1-14).
Sin embargo, Dios también dijo que castigaría a los israelitas si no obedecían sus leyes (ver: Levítico 26: 14-46; Deuteronomio 28:15-68). Una gran parte del Antiguo Testamento se trata de como los Israelitas y sus reyes no obedecieron las leyes de Dios. Dios les envió profetas para que volvieran a pensar en estas leyes. Pero por lo general, la gente no escuchó a estos profetas o los persiguieron (ver: Hechos 7:52). Debido a que Israel no obedeció a Dios, fueron derrotados por otras naciones y exiliados a naciones extranjeras.