es-419_2co_text_udb/06/04.txt

1 line
1022 B
Plaintext

Hemos demostrado una y otra vez que nosotros somos verdaderos siervos de Dios. Nosotros soportamos gran sufrimiento, nos enfrentamos con personas valientes quienes nos hieren, y nosotros vivimos malos momentos. Las personas nos han golpeado gravemente; otros nos han encerrado en prisiones. Nosotros fuimos la causa de las personas para que se alborotaran. Nosotros hemos hecho fuerte labor física ; hemos pasado largas noches sin dormir, y frecuentemente hemos estado con bien poca comida. Pero en todo esto, nuestras vidas son puras, nuestro conocimiento es profundo, y estamos dispuestos a esperar que Dios termine nuestro sufrimiento. Nosotros sabemos cuán amable es Cristo con nosotros; somos llenos del Espíritu Santo, y amamos a otros. Nosotros vivimos de acuerdo a la verdadera Palabra de Dios, y tenemos el poder de Dios. Por medio de Cristo, Dios nos ha puesto junto con Él mismo. Esta es la verdad que continuamente creyemos; es como una armadura que un soladado viste, y como armas para ambas de sus manos.