\v 18 Nuestro corazón no se ha retractado; nuestros pasos no se han ido de Tu camino. \v 19 Mas Tú nos has quebrantado severamente en el lugar de chacales y nos has cubierto con la sombra de la muerte. \v 20 Si nos hemos olvidado del nombre de nuestro Dios o levantado nuestras manos a un dios extraño, \v 21 ¿no lo sabría Dios? Pues Él conoce los secretos del corazón. \v 22 Ciertamente, por causa Tuya nos están matando todo el día entero; se nos considera como ovejas para el matadero.