\v 7 Ellos van de fuerza en fuerza; cada uno de ellos aparece delante de Dios en Sion. \v 8 ¡SEÑOR, Dios de los ejércitos, oye mi oración; Dios de Jacob, escucha lo que yo estoy diciendo! Selah \v 9 Dios, vela por nuestro escudo; muestra preocupación por Tu ungido. \v 10 Porque un día en Tus atrios es mejor que mil en otro lugar. Mejor yo quisiera ser un portero en la casa de mi Dios, que vivir en las tiendas de los malvados.