Los líderes se sorprendieron de que Pedro y Juan hablaran con tanta valentía. Vieron que estos eran hombres comunes y corrientes que no tenían educación. Pero luego recordaron que estos hombres habían estado con Jesús. Así que les dijeron: "Los castigaremos mucho si vuelven a dar mensajes a la gente sobre este hombre, Jesús". Después de decir muchas cosas como esta, dejaron ir a Pedro y a Juan.