\v 8 Pero toda persona y todo animal deben cubrirse con tela de saco, y deben clamar a Dios con fuerza; y cada hombre debe volverse de su mal camino y de la violencia que tiene en sus manos. \v 9 ¿Quién sabe? Este dios podría volverse atrás y tener compasión y ceder de la quema de su nariz para que no perezcamos”.